EL CUENTO DE LA LECHERA POLÍTICA ESPAÑOLA

BOLINAGA LIBRE, POR LA TRAICIÓN POLÍTICA Y LA DEJACIÓN DE FUNCIONES DEL MAYOR RESPONSABLE, UN PERJURO Y UN TRAIDOR.

La política española ha ido tantas veces con el cántaro a la fuente y que por mucho que se le ha dicho que eran demasiados paseos arriesgados y podía rompersele el cántaro, ellos han seguido hasta que al final se ha roto.

Yo ahora pienso en aquellos años dedicados a éste Cuerpo, defendiendo la Ley y a los españoles. Treinta y dos años (32) tirados a la basura. Se han reído de mi, no los españoles valgame el cielo, se han reido desde mi mando Supremo que ha tragado y tragado de todo, sin defender su honor y su juramento, hasta los políticos de cualquier ideario.

Recuerdo aquellas noches frías y lluviosas, cuando escondido entre ramas en esos maravillosos bosques vascos, observaba algún caserío para controlar quien entraba y salía del mismo. Con ese sacrificio personal y de muchos compañeros, conseguíamos información para una vez analizada poder controlar a esos Comandos etarras, que posteriormente conseguíamos detener, presentar ante el Juez y que ingresaran en prisión para ser juzgados.

Días, semanas, meses y años, ya fuera de día o de noche, con frío o calor, entregando nuestra juventud por defender la Ley y el Orden, llevando tranquilidad a "todos" los españoles, nos daba igual su ideario político  defendíamos a todos. Sacrificábamos nuestra vida familiar, para que los españoles pudieran vivir tranquilos, también tuvimos nuestros errores, hay que reconocerlo y esos errores llevaron a muchos inocentes a la tumba. Pero de lo que estoy seguro, es que evitamos muchísimos atentados terroristas.

Nunca nos quejábamos públicamente de la falta de material, trabajábamos con lo que teníamos, pero nuestro honor siempre nos mantenía erguidos en nuestro trabajo. Nuestros muertos los enterrábamos en silencio, eso si con la presencia del político traidor de turno, que tenía que salir en la foto. Llegué a presenciar el retraso del entierro de un compañero caído, debido a que el político de turno no había llegado aún. Y callamos, siempre callados y cumpliendo con nuestro deber, mas aún cumpliendo con nuestra queridísima CARTILLA.

Y yo me pregunto, ¿realmente ha valido para algo tantos y tantos años de trabajo, tantos compañeros asesinados, nuestras hijas asesinadas, para que ahora queden libres los etarras?, pues como que no. La Ley se está incumpliendo.

Cuando en una nación, la Justicia tiene dos varas de medir para los acusados, se está comprobando que algo falla o que la Justicia, presuntamente, está politizada. Que valentía podemos pedirles si justamente carecen de ella. El miedo les lleva a muchos hoy en día a cagarse en los pantalones.

Valentía y valor, solo se le puede reconocer a quienes han estado arriesgando sus vidas en un tiroteo frente a los etarras o frente a delincuentes. En la vida militar, todos tenemos una ficha personal, donde existe un apartado que pone:

VALOR: Se le supone. Pero en muchas fichas podemos leer: VALOR: Reconocido. Pues justamente ahora es cuando realmente debemos demostrar nuestro valor, exigiendo que se cumpla la Constitución, de lo contrario, no nos vengan con presuntas sediciones o golpes de estado, que no hablamos el mismo idioma. Nosotros estamos para que se cumpla la Constitución y si alguien se la salta a la torera, pues se le dice a la cara y alguna cosas más.....

Estamos obligados a acatar una sentencia judicial, pero también tenemos el derecho de no compartirla y desde éste blog, por supuesto que no compartimos la sentencia que deja libre a Bolinaga, el cual pasados unos días desaparecerá igual que lo hizo De Juana Chao.

Y si hipotéticamente, nos aparece de la noche a la mañana un justiciero que se dedique a limpiar España de esa escoria terrorista, pues que nadie se llame a engaño, es lo que han estado buscando un día si y otro también.

Nosotros podríamos pasar ahora olímpicamente, arriesgando nuestra vida de seguir noches y días investigando a etarras para conseguir pruebas que les puedan llevar a la cárcel. y nadie podría echarnos en cara esa dejadez. ¿Para que arriesgo mi vida si no sirve para ayudar a la paz de España?, sencillamente para nada.

Lo jodido es que nuestro HONOR es muy diferente y como GUARDIAS CIVILES, seguiremos al pie del cañón, luchando con riesgo de nuestras vidas, pues así lo elegimos en su día y lo JURAMOS ANTE UNA BANDERA, no como "otros cagones".

Nosotros como siempre cumpliremos con nuestra obligación, ante un texto como éste:

«¡Disciplina! 

Nunca bien definida y comprendida. 

¡Disciplina! 

Que no encierra mérito alguno cuando la condición del mando nos es grata y llevadera. 

¡Disciplina! 

Que reviste su verdadero valor cuando el pensamiento aconseja lo contrario de lo que se nos manda, cuando el corazón pugna por levantarse en íntima rebeldía, o cuando la arbitrariedad o el error van unidos a la acción del mando. 

Ésta es la disciplina que os inculcamos. 

Ésta es la disciplina que practicamos.

Éste es el ejemplo que os ofrecemos.»