HONOR

HONOR
«¡Disciplina! Nunca bien definida y comprendida. ¡Disciplina! Que no encierra mérito alguno cuando la condición del mando nos es grata y llevadera. ¡Disciplina! Que reviste su verdadero valor cuando el pensamiento aconseja lo contrario de lo que se nos manda, cuando el corazón pugna por levantarse en íntima rebeldía, o cuando la arbitrariedad o el error van unidos a la acción del mando. Esta es la disciplina que os inculcamos, esta es la disciplina que practicamos, este es el ejemplo que os ofrecemos.»

domingo, 6 de junio de 2010

El 87,8% de los militares quiere rendir honores en actos religiosos


Creo que esta más que claro, y si quitaran a algunos moracos que están infiltrados en el ejército para mamar del estado “entre otras cosas”, el porcentaje sube y mucho.

Ocho de cada diez efectivos, contrarios a suprimir las misas en celebraciones castrenses. La mayoría cree que los cambios del reglamento deberían debatirse en el Congreso.

Las últimas decisiones de la ministra de Defensa, Carme Chacón, han provocado un hondo malestar no sólo en la clase política, siempre a la espera de polémicas que aviven el enfrentamiento entre Gobierno y oposición, sino también en los militares, a los que no les gusta ser utilizados como arma arrojadiza. Y es que nadie les ha preguntado. De haberlo hecho sabrían que el 87,8 por ciento de ellos se muestra a favor de volver a la situación anterior, aquella en la que podían portar la bandera, interpretar el himno nacional e incluso presentar armas en actos religiosos. Frente a ellos, tan sólo un 6,3 por ciento está de acuerdo con la decisión del Gobierno de cambiar esta tradición por decreto y limitar la intervención de las Fuerzas Armadas a actos estrictamente militares, nunca religiosos.

Pero este dato no es el único que se extrae de la encuesta realizada por NC Report para LA RAZÓN. El hecho de que el Ejecutivo haya decidido actuar «por decreto» y haya eliminado las misas en actos castrenses oficiales no ha gustado a ocho de cada diez militares (83,5%). Y así se refleja en todos los segmentos de edad. Sólo el 8 por ciento sí es partidario de separar los dos tipos de actos.

Así, no es de extrañar que el 88,8 por ciento de la milicia crea que los cambios en el Reglamento de Honores deberían haberse llevado al Congreso. Y el motivo es muy sencillo: En el Parlamento están representadas todas las sensibilidades, no sólo las del Ejecutivo. Aquí, sólo un cuatro por ciento de los encuestados no ve necesario que este asunto sea tratado en la Cámara Baja.

Lejos de la polémica provocada el pasado día 3 durante la celebración del Corpus Christi en Toledo, las Fuerzas Armadas tienen más asuntos en los que pensar. Es el caso del anteproyecto de ley de Derechos y Libertades de los Militares. Seis de cada diez encuestados (60,3) mantienen una opinión positiva y han recibido de buen grado el anteproyecto. Frente a éstos, el 18,5 por ciento discrepa y un alto porcentaje, el 21,2, ni siquiera se pronuncia. Finalmente, hay que destacar que cuatro de cada diez militares creen que la Ley de la Carrera Militar es negativa, frente al 38,3 que la considera básicamente positiva.

Una gran mayoría defiende a ultranza su catolicismo
España sigue siendo católica y el Cuerpo militar, que tan vinculado ha estado siempre a la religión, también. La inmensa mayoría de los militares españoles, un 87,3 por ciento, se declara católico, al igual que el resto de la sociedad española, o al menos, eso es lo que ha puesto de manifiesto el último sondeo de NC Report para LA RAZÓN. Resulta especialmente llamativo el alto porcentaje de militares que profesa el catolicismo en el colectivo más joven. Ocho de cada diez encuestados, un 80,9 por cierto, de edades comprendidas entre 18 y 27 años, declaran abiertamente ser católicos. Únicamente un 3,5 por ciento asegura practicar otra religión y sólo un 6,5 manifiesta no creer en Dios.

Es, precisamente, en este colectivo más joven, donde la mayoría de los militares ve una oportunidad como fuerza de reserva al Ejército. El 71,8 por ciento de los encuestados aceptaría con agrado que todos los jóvenes españoles de ambos sexos reciban durante un periodo de dos a tres meses, preparación militar técnica y teórica como complemento al Ejército profesional. Tan sólo un 17,8 por cierto considera inoportuna esta iniciativa de servicio militar. De este informe se desprende, además, que la mujer y el Ejército ya protagonizan una relación sin complejos y que si alguien acusaba al Ejército de ser una institución machista, tendrá que retractarse.

El balance que se hace por los propios militares es positivo y el 90,3 por ciento de los encuestados, más de nueve de cada diez, se muestra partidario de la incorporación de la mujer a las Fuerzas Armadas. Los militares más jóvenes son los que abogan, en mayor instancia, por que la mujer pueda optar a una carrera militar.

2 comentarios:

eletse dijo...

Cada cosa tiene su lugar, así que DIOS Y PATRIA está bien y es lo correcto.

Doramas dijo...

Muy bien dicho:
http://www.youtube.com/watch?v=ciJ6Z8vAVEw